Nosotros
SOBRE NOSOTROS
COMPARTIMOS SABORES...
La carnicería Figuerola es una empresa familiar, de cuarta generación ininterrumpida, que nació en Begur el año 1898. Nos dedicamos a la venta de productos alimenticios, cárnicos y derivados, además de queso, vino y productos gourmet.
Nos distingue la artesanía, la tradición, los más de 100 años de experiencia y dedicación, además de la búsqueda constante del mejor producto, con el fin de ofrecer a nuestro cliente una gran calidad y el máximo sabor. Por ello, el obrador es una de nuestras partes más importantes, ya que ahí elaboramos productos únicos, que nos distinguen del resto.
Para nosotros es muy importante la proximidad, tanto de nuestros productos como con nuestros clientes. Para nosotros proximidad significa un trato con el cliente de tú a tú, de lo más cercano, amigable, sin barreras, que no nos separe el mostrador.
PASIÓN Y CULTURA GASTRONÓMICA
BEGUR, 2020
MÁS DE 100 AÑOS COMPARTIENDO SABORES
Nuestra historia
Nuestra historia comenzó el 1898. Aquel año, Concepció Rubau Massot y Salvador Figuerola Casanovas abrieron una carnicería en la Plaça del Mercat de Begur (hoy en día conocida como Plaça de la Vila).
Tenían diferente ganado, tales como vacas, ovejas, cabras e incluso caballos, y los mataban en un matadero que era de su propiedad y guardaban la carne, cubierta de sal para que se conservara más tiempo, en una gran despensa.
Sus clientes eran básicamente del núcleo urbano de Begur y de la comarca (Baix Empordà), incluidos los pescadores de las calas vecinas de Sa Riera y Sa Tuna.
Salvador Figuerola Casanovas murió en la década de 1930 y Concepción Rubau, su viuda, siguió sola con el negocio. En esa misma época, la carnicería pudo comprar una cámara frigorífica, que funcionaba a base de barras de hielo, y dejaron de conservar la carne en sal.



Durante la Guerra Civil, la Carnicería Figuerola no cerró las puertas. Nuestra familia continuó despachando, algunas veces a escondidas, ya que (primero los comités de izquierdas y luego los franquistas) les controlaban las ventas, en especial durante la posguerra, debido al racionamiento.
Incluso, uno de los hijos de Concepció y Salvador, Josep Figuerola i Rubau tuvo que esconderse durante el año porque había sido concejal del Ayuntamiento de Begur i querían fusilarle.
Acabada la guerra, la tienda volvió a la normalidad y continuó vendiendo carne, regida por Concepció Rubau y sus dos hijos, Josep y Gumersindo Figuerola i Rubau.
Josep Figuerola se dedicaba al venta del ganado, tanto en Cataluña como por Aragón, lugar donde conoció a la que sería su esposa, Ángela Huguet Clemos, y con quien tuvo una hija. Gumersindo no tuvo descendencia.



La hija de Josep y Ángela, Concepció Figuerola i Huguet, junto con su marido Pere Caner i Triadú, se pusieron al frente del establecimiento en 1950, ayudada por su madre. Ese mismo año, hicieron reformas en la carnicería y compraron, entre otros, una cámara frigorífica eléctrica y un azulejo nuevo de mostrador de Carrara.
En 1964 murió Josep Figuerola i Rubau, y dos años más tarde su madre, Concepción Rubau i Massot. Al negocio se quedaron Gumersindo Figuerola, Ángela Huguet, Concepción Figuerola y Pere Caner.
En 1975, la carnicería se trasladó unos metros más arriba de la plaza, concreto en la calle Bonaventura Carreras, número 1. Y, gracias a la proliferación del turismo en Begur, se amplió la gama de productos y se empezó a vender quesos, embutidos y todo tipo de charcutería y productos gourmet.
En el año 1986, nos incorporamos a la empresa los dos hijos de Pere Caner y Concepció Figuerola, Xavier y Joan Carles. En 1990 murió Ángela Huguet y un año después, Gumersindo Figuerola. Más tarde, Concepción Figuerola se jubiló y actualmente quién está delante de la Carnicería Figuerola somos nosotros dos, en compañía de un equipo joven, especializado y con mucho entusiasmo.



